martes, 9 de febrero de 2010

En Bacaramanga a veces gusta viajar. Son apreciados los conductores que saben perderse. Solo en el despiste ante un cruce de puede descubrir la tierra siempre prometida. Maravilloso lugar que será recordado con emoción. La sorpresa más grande puede estar a la vuelta de una curva que nunca pensaste girar. Y los carteles no dicen nada de estos magníficos lugares. Al destino se llega sin camino.


Hola amigos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.